4. Rituales de Protección
Sin duda, entre todos los rituales que se celebran en el mundo, los más
numerosos son los que hacen relación con algo tan importante como son LA
PROTECCION a nosotros mismos o a nuestros seres queridos: de la envidia, de los
celos, del odio…
Como ya dijimos, todos los pueblos y
culturas han realizado trabajo y rituales como se denominan habitualmente, para
auto protegerse de los ataques del enemigo o para proteger a la esposa, al hijo
o simplemente al amigo que está siendo dañado por las artes mágicas de alguien
con el que se encuentra enfrentado, sea por dinero, trabajo, amores o cualquier
otro factor desestabilizador.
Empezaremos este capítulo con uno de los rituales más antiguos pero últimamente
en desuso y que sirve para proteger el hogar; el equivalente a la antigua
caverna del hombre primitivo.
RITUAL PARA PROTEGER EL HOGAR
Las personas que nos movemos en el mundo de lo esotérico, sabemos que
continuamente acuden a nosotros o nos enteramos por terceros, de los problemas
de tal o cual persona está sufriendo en su propia casa, bien por impregnaciones
psico-telérgicas, bien por el trabajo que alguien por maldad o simplemente por
dinero les está ocasionando.
Curiosamente en antiguos libros religiosos de los primeros siglos del
cristianismo, y en los que se encuentran viejos rituales (que nadie se
escandalice por lo que aquí decimos) se repite uno de los más importantes y
utilizado durante siglos, y que en nuestro país se conoció hasta bien entrado el
siglo XX, como el rito de SALPÁS.
EL RITO DE SALPÁS
Por su antigüedad e importancia vamos a referir este ritual aunque su origen
como ya hemos dicho parece ser cristiano, no descartamos que se remonte a
antiguos rituales paganos, concretamente y debido a su contenido, a los cultos
mítricos que convivieron con el
cristianismo hasta finales del Imperio Romano.
Antes el sacerdote y actualmente el mago o practicante de las artes mágicas, se
dirigirá acompañado de un ayudante (antes era un monaguillo) a la casa del
pueblo que se cree que está infestada, llevando un recipiente con agua bendecida
y un pequeño balde o platito lleno de sal.
Ante la puerta de la casa a ritualizar, lanzara algunos granos de sal y
seguidamente un chorrito de agua bendecida, mejor si se hace con un hisopo.
Hasta aquí el simple ritual, pero hemos de hacer constar que existen una serie
de condiciones que se han de seguir al pie de la letra, y que vamos a referir
seguidamente:
•
El agua ha de ser de pozo y debe ser entregada por el dueño de la casa al mago
(o sacerdote)
•
La sal ha tenido que ser comprada por el dueño de la casa y entregada algunos
días antes al oficiante.
•
El dueño de la edificación pagará una suma ya concertada al oficiante, pero
incluso SIEMPRE, una cantidad de
huevos de gallina o animal similar, al igual que se realizaba en la antigüedad.
Algunos investigadores, entre ellos el desaparecido Joan Amades, máximo
exponente de las tradiciones populares
en gran parte del país, creyó ver en este ritual un origen judío, en el
que rememoraban las plagas que asolaron a los egipcios durante el final de la
estancia de los israelitas en aquel misterioso país. Según antiguas tradiciones,
los magos judíos marcaron con una mezcla de agua y sal, las casas de los judíos
para que el “ángel exterminador” del que nos habla la biblia, supiera donde
habitaban los primogénitos del pueblo judío y así pudieran salvarse.
Sabemos con toda certeza que durante muchos siglos, y paralelamente al Salpás,
se realizaba un ritual parecido en el que el oficiante formaba una pasta con el
agua y la sal, y con ella tapaba todos los agujeros de la puerta, para que no
pudieran entrar las malas influencias o las malas intenciones de enemigos
celosos o vecinos vengativos.
Este ritual recibió en algunas zonas el nombre de “Rito de los Buenos Huevos y
la Sal” debido a los componentes y la consiguiente ofrenda que se hacía al
oficiante.
Todavía hoy podemos observar cómo este ritual de protección y purificación se
celebra en algunas zonas de Ariege, que siglos atrás pertenecieron a Cataluña.
Tras hacer mención de este interesante ritual, vamos a comentar y describir uno
de los más importantes rituales de protección que se practica todavía en la
actualidad.
RITUAL DE LA SAL Y LAS VELAS PARA LIMPIAR LA CASA DE MALAS VIBRACIONES.
En el caso de intentar limpiar la casa de malas vibraciones o infestaciones,
realizaremos este ritual EXACTAMENTE como a continuación vamos a describir.
Ante todo haremos una “catada” o quema de incienso eclesiástico (sirve
perfectamente el incienso Katar) por todo el piso, dejando cerradas las puertas
y ventanas.
Seguidamente colocaremos en cuatro puntos diferentes del piso o casa de campo
(no existe diferencia) cuatro baldes o platitos con sal, de manera que cada cual
coincida con uno de los cuatro puntos cardinales. En caso de no conocerlos de
antemano, aconsejamos que se adquiera una pequeña brújula, fácil de adquirir en
tiendas especializadas. Justo al lado de la sal, colocaremos un vaso (recordemos
que son cuatro puntos diferentes) de cristal o mejor aún de barro (nunca de
aluminio, plástico o fibras sintéticas) lleno de agua de pozo o río, debido a
que su pureza es muy superior a la que sale de los grifos habituales en toda la
gran ciudad.
En una habitación o estancia de la casa, formaremos un cuadrado perfecto con
cuatro velas de cera virgen, o sea cera de abeja, también fáciles de adquirir en
tiendas especializadas, las cuales encenderemos, mejor de noche,
y dejaremos quemar.
Con esta ceremonia, habremos puesto en movimiento los cuatro elementos:
•
INCIENSO: aire
•
AGUA: agua
•
SAL: tierra
•
VELAS: fuego
Este ritual lo haremos durante cuatro semanas, procurando realizarlo los viernes
por la noche, por lo tanto un día a la semana. Tras cada ritual dejaremos bien
cerrada durante toda la noche, la totalidad de la casa, para abrir seguidamente
con la llegada de la mañana, la totalidad del piso, intentando que entre en la
estancia el mayor grado de luz y aire.
Durante la cremación de las velas, el dueño o dueña de la casa, procurará (y
tiene que conseguirlo) con todo el poder de su mente, dar forma mental a
imágenes o proyectos positivos, tanto para él como para su prójimo, para de
esta manera no romper la cadena vibracional positiva que se está formando
por la combinación de sal, incienso, cera y agua.
Si para el oficiante le supone una dificultad el poner su mente en un estado
Alpha o positivo, puede valer el recitar oraciones religiosas, no importa de qué
religión, pues todas tienden a poner en contacto directo nuestro espíritu con el
Sumo Hacedor.
Pensemos que el agua y la sal,
forman parte de casi todos los rituales de iniciación y protección.
PROTECCION DEL HOGAR A TRAVÉS DEL ELEMENTO AGUA.
Al igual que en los anteriores rituales, se llenarán cuatro vasos con agua de
pozo colocando cada uno en los cuatro puntos cardinales, y seguidamente, con una
rama de laurel, se aspergirá agua por todo el espacio de la vivienda, recitando
la siguiente oración:
“Por Terol, por Sanz, por Nemred, por todos los dioses del mundo de las aguas,
con la intersección de las sílfides, con la fuerza de Monteri, con el
beneplácito de todos ellos, que todas las fuerzas benéficas del elemento
primordial, me ayuden a purificar y proteger este mi hogar”
Seguidamente con la rama de laurel, que como ya sabemos fue considerado un árbol
sagrado desde la más remota antigüedad, remojaremos las diferentes estancias a
proteger (hogar, habitación, negocio, etc.) conviene hacerlo todos los jueves,
día propicio para el elemento agua y además día del laurel entre los antiguos
etruscos.
Para las personas que tengan poco tiempo es aconsejable dejar debajo de su casa,
una taza o plato lleno de agua de rio o pozo, en la que se habrá colocado un
trozo de sulfato de cobre, el “Azuli” de las tribus ibéricas, dejándolo hasta
que este mineral se convierta en una piedra de color negro, lo cual nos indicará
que habrá absorbido toda la negatividad existente en la estancia o habitación.
LA PROTECCION PARA EVITAR
LAS MALAS INFLUENCIAS, A TAVÉS DE ELEMENTO AIRE.
De todos los estudiosos del esoterismo es conocido, que muchos de los supuestos
encantamientos son realizados a través del aire, y que este elemento es uno de
los principales para trasmitir las vibraciones mágicas tanto positivas como
negativas.
Existe desde hace muchos siglos un importante ritual que puede servirnos para
acabar con las malas influencias que se trasmiten por mediación del aire, y que
ya era utilizado en antiguos cultos isíricos y mitriádicos.
Para este ritual, es necesario quemar
algunos minutos, incienso vegetal (recordemos que lo hay minerales) y
tras hacer la abreviación u ofrenda a los dioses del aire, empezar a recitar la
siguiente oración:
“Recoged esta esencia límpida y pura, agregad al aire vuestro gran poder, traed
hacia mi los espíritus de luz que hay entre vosotros, para protegernos de noche
y de día, recordad que esta misión es justa y propia, por todo ello, os pido, os
ruego, señores del aire, que me protejáis y perdonéis punto por punto, lágrima
por lágrima, todo el dolor que aquellos que me odian, me deseen. ¡Hágase mi
voluntad!”
Levante entonces los brazos, con las palmas de las manos hacia la frente, en
actitud universal de bendecir, y experimente el poder que fluye de usted, y que
le dará la fuerza necesaria para bendecir y purificar el lugar, obteniendo la
protección de los elementos y deidades que habitan en el elemento aire.
EL PODER ESTÁ MAYORMENTE EN USTED
Como usted verá, amigo lector, en estos cortos y sencillos pero prácticos
rituales, hemos intentado introducirle en unos ritos que a fuer de su sencillez,
no por ello dejan de ser más prácticos que otros en los que se mezclan productos
y ornamentaciones que en el mejor de los casos solo harían que nuestra cartera o
monedero se vacié.
Hemos dicho anteriormente, y lo seguiremos diciendo durante varios capítulos que
forman este pequeño manual mágico, que la fuerza de la magia se concentra
principalmente en nuestro cerebro, y que éste es nuestro principal "elemento
mágico", sin descartar por ello, los demás factores que convierten a la magia en
algo maravilloso, y que si se realiza como indicamos, puede beneficiarnos
notablemente.
Hemos querido descartar en estos rituales productos raros o de difícil
adquisición, ya que solamente hemos procurado recoger algunos rituales que por
antiguos, creemos que vale la pena ser conocidos y practicados, pues el amigo
lector, esta mayormente en usted mismo.