II. Las Herramientas del Arte
Mágico.
Los Brujos utilizan herramientas mágicas
en sus rituales para convocar a los
espíritus, invocar a las deidades y para
consagrar y bendecir.
Desde la espada a la campana, cada
herramienta es querida amorosamente y nunca
se usa para propósitos que no tengan que ver
con la Magia.
Hechas a mano o compradas, todas durarán
lo que la vida del Brujo... Y más allá.
El uso de objetos con fines rituales no
es exclusivo de la Wicca. En efecto, la
mayoría de las religiones los utilizan
cuando celebran sus ceremonias.
Altares, varitas mágicas y el incienso
son bastante comunes, mientras que los
pentáculos y cordones especiales no lo son
tanto.
Las herramientas se utilizan en la wicca
para dirigir la energía de acuerdo con la
voluntad del brujo. Hay que recordar que las
herramientas, aunque estén consagradas para
usos rituales, no tienen poder en sí mismas:
simplemente obran como un foco de su propio
poder. Así pues, las herramientas son menos
importantes para un ritual que su propio e
interior poder, aunque ciertamente realzan
un ritual.
Las herramientas mágicas pueden obtenerse
de varias maneras: Heredadas entre los
miembros de una congregación o familiar,
fabricadas o compradas.
Si usted es una persona de naturaleza
práctica y creativa, fabricarlas es su mejor
opción, pues el producto final mejorará con
sus propios poderes.
Las cacharrerías son lugares curiosos
para encontrarlas.
Los cuchillos de mango blanco y los
cálices se pueden conseguir a menudo en
sitios parecidos. Si usted es incapaz de
encontrar una herramienta mágica, no permita
que eso le impida practicar la wicca y, en
su lugar, improvise.
Recuerde que no hay maneras correctas o
equivocadas a la hora de celebrar un ritual,
y que su poder interior es lo verdaderamente
importante.