Conjuro contra los encantamientos…

Los encantamientos pueden ser muchos y variados. De la misma forma que nosotros provocamos actos mágicos  para obtener un beneficio, quizás otras personas hagan lo mismo pero con fines no tan positivos. Una manera de evitar caer en un encantamiento, si es que no lo deseamos, será este conjuro, y naturalmente no lo deseamos, porque representaría perder nuestra propia personalidad.

Requisitos:

-  Debemos llevar a cabo este conjuro cada día transcurridos la fase de la luna llena y siempre al día de nuestro cumpleaños.

-  La hora ideal para el conjuro será a partir del ocaso del sol, pero antes de que caiga la noche por completo.

-  Una fotografía personal.

Procedimiento:

1.   Sentados cómodamente y con los ojos abiertos, situaremos sobre una mesa limpia nuestra fotografía personal.

2.   Entraremos en relajación mediante tres respiraciones profundas. Mientras respiramos debemos sostener la fotografía con ambas manos.

3.   En nuestra mente repetiremos la imagen que aparece en la fotografía. Cuando la visualicemos perfectamente, comenzaremos a generar un campo lumínico de protección. Para ello, imaginaremos que un halo de luz rodea la fotografía de nuestra persona.

4.   Manteniendo la imagen anterior en la mente, procederemos a decir en voz alta: “Yo (nombre) que nací (fecha de nacimiento) conjuro a las potencias celestiales para que me ayuden y protejan”

5.   Profundizaremos en la relajación con un ciclo de otra respiración  profunda más y repetiremos: “Yo (nombre) niego a la cesión de mi energía. Niego que se utilice mu imagen y mi conjuro a las más altas potestades para que guarden mi alma, mi vida y mi luz”

Al finalizar este conjuro debemos saber que, dado que teníamos la fotografía en las manos, la energía de protección habrá llegado hasta ella, por tanto, nuestra esencia también está protegida.  Por lo que se refiere a la ilustración debemos guardarla en un lugar seguro. No estará de más que, de cuando en cuando, la recarguemos, para ello bastará que la tengamos en las manos cada vez que repitamos el conjuro de protección. Si lo deseamos podemos llevar la foto en nuestro bolso o cartera, así de esta forma cuando no podamos hacer la invocación pertinente, siempre nos quedará la solución de tomar la foto entre las manos y pedir ayuda.